La implementación de la norma ISO 14090 ofrece múltiples ventajas para adaptarse al cambio climático:
- Proporciona un marco estructurado para identificar y gestionar los riesgos climáticos, lo que mejora la resiliencia y la capacidad de respuesta.
- Fomenta la sostenibilidad al integrar prácticas que reducen el impacto ambiental.
- Mejora la imagen corporativa y la confianza de los stakeholders, demostrando un compromiso con la responsabilidad ambiental.
Facilita el cumplimiento de regulaciones y puede abrir puertas a oportunidades de financiación y apoyo gubernamental.